La evaluación de la involución uterina es esencial para asegurarse de que transcurre de forma normal y no deriva en alguna patología que pueda retrasar la recuperación postparto. Dicho retraso ocasionará importantes pérdidas económicas por disminución de la producción, gastos en tratamientos y servicios veterinarios, por lo que debe ser detectado y solucionado lo antes posible.