Lucas Pantaleon
La leptospirosis es una enfermedad de importancia mundial causada por la bacteria Leptospira spp. Esta enfermedad tiene un impacto significativo en la salud y producción del ganado lechero. Es una causa importante de falla en la reproducción, aborto y disminución en la producción de leche. Los animales infectados eliminan las bacterias en los fluidos vaginales y la orina.
La enfermedad se transmite a través de la exposición de las membranas, heridas en mucosas o piel, también por fluidos corporales contaminados, agua o suelo. Es una enfermedad zoonótica, por lo tanto, los humanos que entran en contacto con la bacteria se infectan y los productores de leche corren un alto riesgo. Las vacunas para la prevención de esta enfermedad está disponible en el mercado, sin embargo, no son completamente efectivas para prevenir la leptospirosis.
En las especies gregarias, los animales se asocian entre sí de manera no aleatoria, lo que resulta en interacciones sociales distribuidas de manera desigual. El conocimiento de la estructura de contacto del ganado, a través del análisis del entorno social, podría mejorar la prevención de enfermedades infecciosas contagiosas y el bienestar animal.
El análisis del entorno social es una herramienta que permite comprender y evaluar la complejidad de las relaciones sociales y proporciona una comprensión más precisa de la estructura social y grupal de los animales. Además, este tipo de análisis podría ayudar a estimar la probabilidad de ocurrencia de cierto contacto o evaluar cómo los diferentes atributos de los animales conducen a cambios en los contactos de los animales que pueden afectar las estructuras de la red.
Un trabajo reciente publicado en Applied Animal Behavior Science se centró en estudiar los efectos de las interacciones sociales en torno a la leptospirosis, más específicamente la transmisión basada en el comportamiento sexual. Los investigadores plantearon la hipótesis de que los patrones de contacto entre el ganado lechero del mismo grupo estaban influenciados por los atributos individuales de las vacas y las propiedades estructurales del entorno social.
Los animales incluidos en el estudio consistieron en un grupo de 170 vacas lecheras y dos grupos de terneros destetados de 33 animales cada uno. Los animales se alojaron al aire libre y se mantuvieron en sistemas basados en pastos durante todo el año. Los comportamientos de contacto estudiados se seleccionaron en función de la probabilidad transmisión de leptospira spp. y fueron: olfatear, lamer y frotar la cara en el área genital de otros animales. Se observaron y registraron comportamientos durante 3 semanas en vacas y 4 semanas en el grupo de terneros destetados.
En general, los animales estudiados en estos rebaños tenían poca interacción y contacto con los miembros del grupo. Las observaciones de este estudio revelaron que las interacciones eran extremadamente escasas, a pesar del hecho de que la mayoría de los animales de cada grupo estaban conectados. Las redes en este estudio se basaron en el comportamiento sexual que a su vez está determinado por el ciclo reproductivo. Por ejemplo, las vacas que fueron inseminadas tenían el doble de probabilidades de interactuar que las vacas preñadas. En el grupo de terneros, los machos iniciaron la interacción social con mayor frecuencia y hacia las hembras.
Las vacas con más de 5 partos tuvieron significativamente más contactos que los animales más jóvenes. Este es un hallazgo importante ya que las vacas más viejas tienen más probabilidades de ser infectadas por leptospira spp. y esta mayor interacción puede fomentar la transmisión.
Otra observación interesante del estudio fue que las terneras o vacas recién ingresadas estaban más involucradas en los contactos con otros animales en el rebaño. Esto podría tener implicaciones desde el punto de vista de la enfermedad infecciosa, porque cuando un animal infectado o animales con un estado de salud desconocido se introduce en un rebaño, las interacciones más frecuentes aumentarían el riesgo de propagación de la enfermedad.
Es importante reconocer e investigar más a fondo este tipo de información sobre los patrones de comportamiento sexual que podrían influir en la transmisión de leptospirosis en las lecherías. La identificación de los animales con alto riesgo (hembras en celo) es vital para la vigilancia específica y la bioseguridad porque los animales con mayor interacción podrían tener un papel importante en la transmisión de enfermedades infecciosas entre el rebaño. Esta estructura de contacto debe tenerse en cuenta no solo por razones de bienestar animal (interrupciones grupales) sino también para diseñar programas de bioseguridad más eficientes.
Referencia
Inés de Freslon, Beatriz Martínez-López, Jaber Belkhiria, Ana Strappini, Gustavo Monti. 2019. Use of social network analysis to improve the understanding of social behaviour in dairy cattle and its impact on disease transmission. Applied Animal Behaviour Science. 212: 47-54.
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