Álvaro García
El silo de sésamo podría ser una buena alternativa a otro forrajes en regiones semiáridas. En varias partes del mundo la estación seca limita severamente la disponibilidad de forraje para el ganado. Este problema es muy común en las regiones tropicales donde no solo la masa forrajera esta limitada, sino que la digestibilidad del forraje disminuye considerablemente. En estas condiciones, los ganaderos dependen de los forrajes cosechados durante la temporada de lluvias, siendo el heno y el ensilado los métodos más frecuentes utilizados para la conservación.
La calidad del forraje preservado generalmente nunca es más alta que el forraje fresco. Estas pérdidas en el valor nutritivo pueden proceder de una fermentación inadecuada, calentamiento y oxidación de nutrientes, efluentes y crecimiento de microorganismos indeseables. El silo de maíz ha sido un elemento básico en la dieta de las vacas lecheras a lo largo de los años en estas zonas, ya que proporciona nutrientes altamente digestibles cuando se conserva correctamente.
Sin embargo, el problema con el maíz es que su éxito como cultivo depende en gran medida de la disponibilidad de agua, particularmente durante las etapas críticas de su desarrollo. Otros cultivos que se utilizan en estas regiones son el mijo perla (Pennisetum glaucum) y el girasol (Helianthus annuus L.). Otra planta con potencial para la producción de silo en regiones semiáridas es el sésamo (Sesamum indicum L.).
Características del sésamo como planta forrajera
El sésamo es uno de los cultivos de semillas oleaginosas más antiguos, domesticado hace más de 3000 años. Su extenso sistema de raíces permite que este cultivo sea bastante tolerante a las condiciones de sequía, creciendo donde otros cultivos fallan. Sin embargo, requiere niveles de humedad adecuados durante la germinación y las primeras fases de crecimiento.
Las variedades de sésamo se han adaptado a muchos tipos de suelo. Los cultivos de alto rendimiento prosperan mejor en suelos bien drenados y fértiles de textura media y pH neutro, sin embargo, tienen menos tolerancia para suelos salinos y condiciones de acumulación de agua. Los cultivos de sésamo requieren de 90 a 120 días sin presencia de heladas y las condiciones cálidas superiores a 23 °C favorecen su crecimiento y producción.
Un experimento reciente (Amorim et al., 2020) evaluó los parámetros de fermentación, la composición química y la degradabilidad in situ del silo de sésamo en comparación con otros silos más comúnmente utilizados en climas secos. El clima de la región donde se realizó el experimento se caracteriza por su clima cálido y semihúmedo, con temperaturas mínimas y máximas de 18 y 36 ºC, respectivamente y una precipitación promedio de 900 mm.
El experimento tenía dos partes:
- Evaluación de mermas, la fermentación y la composición química de los silos. Hubo cuatro tratamientos, uno por cultivo de: sésamo, maíz, mijo perla y girasol. Se ensilaron cuatro réplicas por cultivo en micro silos de 3 kg y se dejaron fermentar durante 30 días.
- La degradabilidad in situ se evaluó mediante cuatro tratamientos (silo de sésamo, maíz, mijo y girasol) y tres repeticiones (animales) por tratamiento. Los tiempos de incubación fueron 0, 6, 12, 24, 48, 72 y 96 h.
Las parcelas experimentales fueron de 143 m2 divididas en 16 lotes de 5 m2 cada uno y separadas por una fila sin cultivar (1 m de ancho). Se sembraron veinte semillas por metro lineal. La fertilización por hectárea fue la misma para todos los cultivos, de la siguiente manera: 70 kg de urea, 40 kg de superfosfato y 60 kg de cloruro de potasio.
El silo de sésamo parece un silo de calidad para alimentar ganado vacuno
La producción de biomasa por hectárea fue numéricamente más alta para el mijo (17.8 toneladas) seguida del sésamo (10.8), sin embargo, no hubo diferencias estadísticas entre ambos cultivos. El pH observado para el silo de sésamo fue adecuado para una buena fermentación (4.07) y no difirió del de mijo o maíz. Sin embargo, el silo de sésamo presentó la mayor concentración de nitrógeno amoniacal de los 4 silos (8.85%).
Tabla. Composición nutritiva y degradabilidad ruminal de los silos
En general, el silo de sésamo tuvo mermas y parámetros de fermentación similares a los silos de maíz y girasol. Tenía un contenido en materia seca (MS; tabla) moderado (32.65%), adecuada concentración en proteína bruta (10.13%) y nutrientes digestibles totales (51.44%) y bajo contenido en lignina (2.55%).
El ensilado de sésamo también presentó una alta degradabilidad de la MS (al igual que el maíz y el mijo), lo que sugiere un buen valor nutricional como alimento para rumiantes. Los resultados de este experimento mostraron que el sésamo tiene el potencial de producir biomasa y silo de calidad para la alimentación de vacas lecheras.
Referencia:
Amorim, D.S., Loiola Edvan, R., do Nascimento, R.R., Bezerra, L.R., de Araújo, M.J., da Silva, A.L., … Nascimento, K.D.S. 2020. Fermentation profile and nutritional value of sesame silage compared to usual silages. Italian Journal of Animal Science. 19(1): 230-239.
© 2020 Dairy Knowledge Center. All Rights Reserved.
